La vivienda está construida en el centro de una parcela que se encuentra situada al borde del mar Cantábrico, en la costa sureste de la bocana de la bahía de Santander, frente al Palacio de la Magdalena y la isla de Mouro, en un entorno paisajístico absolutamente inigualable.
Dicha parcela forma parte de una estructura suburbana de parcelas de generosa dimensión para vivienda unifamiliar, y sin espacios públicos. La edificación se implanta en el terreno de manera aislada y centrada, en su cota más alta para disponer libremente de sus magníficas vistas. La vivienda define así dos ámbitos en la parcela; un espacio anterior, hacia los accesos, más doméstico, y otro más expuesto y abierto hacia la bahía.